Stay informed:

William Morris y el Arts and Crafts

William Morris (1834-1896) fue una de las personalidades británicas más destacadas de la segunda mitad del siglo XIX, consagrado como el máximo representante del Arts & Crafts Movement. En vida fue más conocido como literato, una de las muchas facetas creativas que desarrolló a lo largo de su vida, pero hoy es recordado por los muchos diseños que llevó a cabo en la cooperativa que fundó en 1861, Morris & Co.

William Morris - Wikipedia, la enciclopedia libre

Su máxima aspiración era reformar el arte y la sociedad, demostrando a través de la práctica una mejor y más ética manera de hacer las cosas, todo basado en el sueño de una Arcadia Medieval y una Utopía Moderna, y una aversión hacia la civilización moderna. Por ello fue también un visionario activista político, quien ayudó a fundamentar el British Labour Movement

Todas sus actividades deben ser entendidas dentro del espíritu reformista que permeó la segunda mitad del siglo XIX en reacción a la transformación sin precedentes que se estaba dando en la estructura de la sociedad Victoriana, la cual se hallaba dividida por la desigualdad económica y de clase.

La industrialización había contaminado las ciudades y destruido la cohesión social. La frenética competencia que se estaba gestando en el mercado libre británico estaba llevando a la producción en masa de productos de mala calidad, a la vez que los trabajadores se convertían en esclavos de las máquinas, perdiendo sus habilidades y quedando desconectados de los productos que fabricaban y de la sociedad en general.

Críticos como John Ruskin empezaron a apuntar que el imperante Estilo Victoriano era el resultado de una sociedad corrupta por la codicia, la decadencia y la opresión, y buscaron cambiar este status quo a través de una reforma de las artes. Los represivos e hipócritas valores de la Era Victoriana habían dado lugar ya a una rebelión artística e idealista a mediados de la década de 1840, liderada por los pintores Dante Gabriel Rossetti, William Holman Hunt y John Everett Millais. El escapismo romántico que popularizó este grupo, conocido como la Hermandad Prerrafaelita, inspiró otros movimientos de artistas y diseñadores, entre los cuales encontramos a William Morris. En este movimiento era central la concepción de una Arcadia Medieval, una noción altamente romantizada de una sociedad preindustrial, la cual ansiaba tanto Morris.

El trágico destino de la modelo-poeta que estuvo a punto de morir mientras  posaba para 'Ofelia'

A esto, William Morris le añadió el deseo de devolver la dignidad al trabajo mediante sus actividades en Morris & Co. Buscaba un balance de la conciencia social a través de sus actividades empresariales, produciendo objetos bien diseñados y manufacturados. Sin embargo, esto se hallaba bajo el conflicto entre artesanía y asequibilidad. Esto hizo que, en parte, el sueño de Morris de un arte “popular” o “democrático” se quedara en eso, un sueño. Esta se une a las muchas paradojas dentro de la vida de Morris: un hombre rico que alentaba la revolución de los pobres, el gentlemany el artesano, el bardo y el empresario… Pero estas contradicciones no restan valor e importancia al significado de su trabajo. Pueden ser vistas como el sueño de un pasado a la par que la visión de un futuro: el testamento de su propio tiempo.

Desde niño tuvo interés en la literatura, de donde sacó sus ideales medievales, y la jardinería, de donde sacó su interés por la botánica. Quedó también muy impresionado por la arquitectura gótica, la cual se comenzaba a redescubrir en esos momentos. Eventualmente, comenzó a estudiar teología en Oxford junto al que se convertiría en su amigo más cercano, Edward Burne-Jones. Pero quien más influenció a Morris fue John Ruskin, uno de los primeros en apuntar el daño social causado por el materialismo y la desconexión de creatividad y trabajo en el sistema industrial. Ruskin entendía la dignidad de la creación manual y la interconexión entre arte y sociedad. Esto impactó tanto a Morris que pondría en práctica sus teorías.

La arquitectura gótica impactó tanto en él que decidió que comenzaría una carrera como arquitecto, pero pronto abandonó y decidió convertirse en pintor, instado por Rossetti. En estos años se mudó a Londres con su amigo Burne-Jones a un apartamento sin amueblar y al encontrar solo muebles de mala calidad, decidió diseñarse los propios, de inspiración medieval.

En esta etapa como pintor, realizó La Bella Isolda, cuadro para el que modeló Jane Burden, amante de Rossetti. Morris se enamoró de ella, se prometieron y casaron, aunque ella más tarde afirmó que nunca le amó, pues amaba a Rossetti.

William Morris – La Bella Isolda (1858) – Tate Britain | El Ojo En El Cielo Jane Morris - Wikipedia, la enciclopedia libre

Pero ella era de clase menor y no tenía más opciones, pues Rossetti estaba prometido a Elisabeth Siddal, otra de las musas de los artistas Prerrafaelitas.

Elizabeth Siddal - Wikipedia La musa prerrafaelita, Elizabeth Siddal (1829-1862)

Poco después, William Morris compró el que sería su futuro hogar, “The Red House”, el cual fue diseñado por Philipp Webb en cercana colaboración con Morris. Cuando estuvo terminado fue amueblado por Morris y su círculo de amigos con tapices bordados, murales, vidrieras y muebles pintados con motivos de inspiración medieval, especialmente gótica. "The Red House" fue un verdadero palacio del arte y una ratificación de los sueños de Morris de una Arcadia medieval.

Archivo:Philip Webb's Red House in Upton.jpg - Wikipedia, la enciclopedia  libre

El compañerismo de este proyecto colaborativo condujo a la formación de Morris, Marshall, Faulkner & Co. en abril de 1861. Se declaró que la empresa se encargaría del diseño y producción de decoración mural, tallado, vidrieras, trabajos en metal y muebles. Comenzaron contratando a otros artesanos y profesionales, y poco después sus mujeres y familiares se fueron introduciendo en la firma. Jóvenes indigentes de Londres fueron también contratados y entrenados para trabajar en los talleres.

La firma comenzó a recibir encargos, especialmente eclesiásticos, en un momento, la década de 1860, marcado por la proliferación de construcción y restauración de iglesias victorianas. Morris, Marshall, Faulkner & Co. debió su éxito a la capacidad de Morris para controlar y coordinar la producción creativa de La Firma, y se dedicó de todo corazón a numerosos proyectos. Como director artístico, Morris forjó un look reconocible que promovía las virtudes de la simplicidad, la utilidad, la belleza, el simbolismo y la calidad. Los muchos diseños producidos por La Firma ejemplificaron los atributos que Morris defendía a través de su conocido dicho, que uno no debería "tener nada en su casa que no sepa que es útil o crea que es hermoso". A lo largo de su prolífica carrera, Morris creó más de 600 diseños para papeles pintados y textiles, así como más de 150 diseños para vidrieras.

William Morris y el movimiento Arts and Crafts: diseño y estética - LASARA Diseño de papel tapiz floral | William Morris

A pesar de haber abandonado la teología, la arquitectura y la pintura, Morris había desarrollado un ojo de conocedor de la calidad y una empatía natural por los materiales, la textura, el color y el diseño. Estos atributos fueron vitales para el éxito de su futura empresa. Podría decirse que el genio de Morris como diseñador residía en su capacidad para destilar la salvaje y laberíntica campiña británica en hermosos patrones florales y naturales bien ordenados para el hogar. Tuvo tanto éxito que muchos de sus patrones nunca dejaron de producirse. Hoy en día, algunos de sus estampados florales más conocidos todavía se utilizan para decorar paredes, muebles, tapicería y mucho más.

Los problemas financieros de la empresa hicieron que sus socios volvieron a sus anteriores ocupaciones y Morris contratara a George Warington Taylor, quien estabilizó financieramente La Firma y la convirtió en una empresa que generaba beneficios. Al introducir un espíritu más empresarial, Taylor transformó la cooperativa de artistas en una organización bien administrada y cada vez más rentable. Su gama de diseños se volvió más orientada al mercado, y La Firma comenzó a producir artículos de inspiración vernácula inglesa algo más sencillos, como las sillas Sussex y Rossetti, que eran menos costosas que los anteriores muebles de estilo medieval altamente decorados. Estos nuevos diseños articularon un estilo más simple, democrático y accesible que tendría mucha influencia en las generaciones posteriores de diseñadores.

En 1866, La Firma obtuvo dos importantes encargos públicos: la redecoración de la Armería y la Sala de Tapices del Palacio de St. James y el diseño interior del Comedor Verde del Museo de South Kensington (hoy el V&A Museum).

El comedor verde en el Museo South Kensington, c1870.

Estos proyectos trajeron el reconocimiento oficial de La Firma, así como las ganancias que tanto necesitaba. La firma también llevó a cabo muchos proyectos privados de diseño de interiores para clientes como los artistas Birket Foster y Val Prinsep. Con Taylor como gerente comercial, Morris ahora podía dedicar más tiempo a la poesía. Tras la publicación de “The Earthly Paradise” Morris fue el poeta más popular de Inglaterra del momento. En este tiempo, comenzada la década de 1870, comenzó también su interés por la caligrafía, realizando dos libros manuscritos completos. 

En 1873 comenzó a diseñar tejidos y a experimentar con tintes. Los viajes a Leek, un centro de la industria de la seda, también llevaron a Morris a una mejor comprensión de los efectos de la industrialización. Allí encontró repugnante la repetición aturdidora de la línea de producción. Era la compartimentación del proceso industrial lo que más le preocupaba, porque creía que a través de la división del trabajo se perjudicaba el bienestar del trabajador y las artes en su conjunto. Pero Morris no se opuso a la mecanización si podía utilizarse para producir artículos de calidad y, de hecho, algunas alfombras de Morris & Co. se tejían a máquina. Sin embargo, se opuso a los tintes de anilina modernos, que eran inestables y, a menudo, de tono chillón, e insistió en el uso de antiguas recetas de tintes vegetales, que proporcionaban tonos más sutiles.

Trabajadores de Morris & Co. imprimiendo sobre tejidos en el taller de... |  Download Scientific Diagram

En 1874 compró las participaciones de su empresa para tomar el control, quedando la compañía como “Morris and Co.”. Además, en este momento comenzó a dar conferencias en las que defendía la preponderancia de las Artes Decorativas, hasta entonces relegadas y denostadas, afirmando que eran las de más valor al ser de utilidad, y que eran más relevantes en la sociedad porque las personas interactuaban con los objetos a diario por necesidad. A través de estas conferencias, Morris fue el primero en proponer la idea de que el arte sufriría si se aliaba con el lujo en vez de con la utilidad, y que debería ser “popular” y “democrático”. Insistió en que los diseñadores tenían una obligación moral de crear objetos de calidad.

Bajo la dirección artística de Morris, ya en la década de 1880, La Firma vendía ya una variada gama de productos, que incluía vidrieras, muebles, cristalería, azulejos, telas, papeles pintados, bordados, tapices y alfombras. Morris & Co. también ofrecía un servicio completo de diseño de interiores con un gusto que combinaba lo práctico con lo bello.

Es indudable que William Morris fue un adelantado a su tiempo enamorado del pasado. Sus ideas del arte, unida a sus convicciones políticas, nos dejaron la herencia de una concepción de arte producido de manera ética con los trabajadores y el medio ambiente. Por todo ello, Morris fue la figura inspiradora de todo un movimiento, el floreciente Arts & Crafts. De hecho, sus miembros estaban tan entusiasmados con las enseñanzas de Morris y Ruskin que establecieron talleres colectivos y se convirtieron en la vanguardia de la reforma del diseño.